33. Vivía a la sazón en Judea el profeta Habacuc; éste, después de haber preparado un cocido y desmenuzado pan en un plato, se dirigía al campo a llevárselo a los segadores.





“Que Jesus reine sempre soberano no seu coração e o faça cada vez mais digno de seus divinos dons.” São Padre Pio de Pietrelcina