18. Ellas hicieron lo que Susana había ordenado; cerraron las puertas del jardín y entraron en casa por una puerta lateral para traer lo que les había mandado. No sabían que los dos ancianos estaban allí escondidos.





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina