23. Se acercó entonces Sedecías, hijo de Kenaaná, y dio una bofetada a Miqueas en la mejilla, diciendo: «¿Por qué camino se ha ido de mí el espíritu de Yahveh para hablarte a ti?».





“Peçamos a São José o dom da perseverança até o final”. São Padre Pio de Pietrelcina