25. Y tú, Esdras, con esa sabiduría de tu Dios que reside en ti, designa jueces y magistrados, para hacer justicia a todo el pueblo que está del otro lado del Éufrates, es decir, a todos los que conocen la Ley de tu Dios. Y enseña esa Ley a quienes no la conocen.





“Para mim, Deus está sempre fixo na minha mente e estampado no meu coração.” São Padre Pio de Pietrelcina