Znaleziono 3259 Wyniki dla: una

  • Y oí como una voz que salía de los cuatro seres vivientes, que decía: Un celemín de trigo por el salario de un día; tres celemines de cebada por el salario de un día; pero el aceite y el vino no tocarlos. (Apocalipsis 6, 6)

  • Dieron a cada uno una vestidura blanca, y les dijeron que tuvieran paciencia aún por un poco de tiempo, hasta que se completase el número de sus compañeros de servicio y de sus hermanos, que iban a morir como ellos. (Apocalipsis 6, 11)

  • Cuando el cordero abrió el sexto sello, se produjo un terremoto violento, el sol se oscureció como un tejido de crin, la luna se hizo toda como de sangre, (Apocalipsis 6, 12)

  • y las estrellas del cielo se cayeron sobre la tierra, como una higuera deja caer sus higos verdes sacudida por un viento fuerte; (Apocalipsis 6, 13)

  • Después de esto vi aparecer una gran muchedumbre, que nadie podía contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua. Estaban en pie delante del trono de Dios y delante del cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. (Apocalipsis 7, 9)

  • El segundo ángel tocó la trompeta, y una enorme mole de brasas, como una montaña, fue lanzada al mar; la tercera parte del mar se convirtió en sangre, (Apocalipsis 8, 8)

  • El tercer ángel tocó la trompeta, cayó del cielo una gran estrella, ardiente como una llama; cayó sobre la tercera parte de los ríos y sobre las fuentes de las aguas. (Apocalipsis 8, 10)

  • El cuarto ángel tocó la trompeta, y la tercera parte del sol, la tercera parte de la luna y la tercera parte de las estrellas quedaron heridas de muerte de tal manera que se oscureció la tercera parte de las mismas y el día perdió una tercera parte de su esplendor, lo mismo que la noche. (Apocalipsis 8, 12)

  • El quinto ángel tocó la trompeta, y vi una estrella que había caído del cielo sobre la tierra; y le dieron la llave del pozo del abismo. (Apocalipsis 9, 1)

  • su pecho, como una coraza de hierro, y el rumor de sus alas, como el ruido de carros de muchos caballos que corren a la batalla; (Apocalipsis 9, 9)

  • El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro ángulos del altar de oro que está delante de Dios, (Apocalipsis 9, 13)

  • Después vi otro ángel vigoroso, que bajaba del cielo envuelto en una nube; sobre la cabeza tenía el arco iris; su rostro era como el sol, y sus piernas como columnas de fuego. (Apocalipsis 10, 1)


“Que Maria seja toda a razão da sua existência e o guie ao porto seguro da eterna salvação. Que Ela lhe sirva de doce modelo e inspiração na virtude da santa humildade.” São Padre Pio de Pietrelcina