Znaleziono 656 Wyniki dla: ofrenda por el pecado

  • Esta ofrenda será presentada por el sacerdote que sea consagrado entre los descendientes de Aarón. Es derecho perpetuo del Señor; será totalmente quemada. (Levítico 6, 15)

  • Toda ofrenda de sacerdote será totalmente quemada; no se comerá nada". (Levítico 6, 16)

  • "Di a Aarón y a sus hijos: Éste será el ritual del sacrificio por el pecado: la víctima será inmolada delante del Señor en el lugar donde se inmolan los holocaustos: es una cosa santísima. (Levítico 6, 18)

  • No se podrá comer ninguna víctima de un sacrificio por el pecado, cuya sangre haya entrado en la tienda de la reunión para hacer el rito de absolución en el santuario: será quemada en el fuego". (Levítico 6, 23)

  • El sacerdote lo quemará sobre el altar: es una ofrenda quemada en honor del Señor. Es un sacrificio de reparación. (Levítico 7, 5)

  • "En el sacrificio por el pecado y en el de reparación, la ley es la misma: la víctima será del sacerdote que haya hecho el rito de absolución. (Levítico 7, 7)

  • Toda ofrenda preparada al horno, a la plancha o en la sartén, será también del sacerdote que la ofrezca. (Levítico 7, 9)

  • Pero toda ofrenda, amasada en aceite o seca, será por igual para todos los hijos de Aarón". (Levítico 7, 10)

  • Añadirá esta ofrenda a las hogazas de pan fermentado y al sacrificio de reconciliación ofrecido en acción de gracias. (Levítico 7, 13)

  • De cada ofrenda se reservará una porción como tributo al Señor, la cual será para el sacerdote que haya derramado la sangre del sacrificio de reconciliación. (Levítico 7, 14)

  • "Si la víctima es ofrecida en cumplimiento de un voto o como ofrenda voluntaria, se comerá también el mismo día; pero las sobras podrán comerse al día siguiente. (Levítico 7, 16)

  • Si se come al tercer día la carne del sacrificio de reconciliación, el oferente no será grato; su ofrenda no será tenida en cuenta, y el que haya comido de ella llevará el peso de su falta. (Levítico 7, 18)


“Que Nossa Mãe do Céu tenha piedade de nós e com um olhar maternal levante-nos, purifique-nos e eleve-nos a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina