Znaleziono 205 Wyniki dla: oído

  • "Saca del campamento al blasfemo, pongan sobre su cabeza las manos todos los que han oído la blasfemia, y sea matado a pedradas por toda la comunidad. (Levítico 24, 14)

  • Si destruyes a este pueblo como a un solo hombre, las naciones que han oído hablar de ti dirán: (Números 14, 15)

  • "¿Hasta cuándo habré de soportar a esta comunidad perversa que murmura contra mí? He oído las murmuraciones de los israelitas contra mí. (Números 14, 27)

  • Diles: Por mi vida, palabra del Señor, que os trataré según las mismas palabras que yo os he oído; (Números 14, 28)

  • "Pregunta a los tiempos pasados que te han precedido desde el día en que Dios creó al hombre sobre la tierra. ¿Desde uno a otro extremo del cielo se ha visto jamás cosa tan grande o se ha oído cosa semejante? (Deuteronomio 4, 32)

  • ¿Hay pueblo que haya oído la voz de su Dios hablar en medio del fuego, como la has oído tú, y quede todavía con vida? (Deuteronomio 4, 33)

  • Desde el cielo te habló para enseñarte, y sobre la tierra te ha hecho ver su gran fuego y, de en medio del fuego, has oído sus palabras. (Deuteronomio 4, 36)

  • para decirme: Hemos visto al Señor, nuestro Dios, su gloria y su grandeza, y hemos oído su voz en medio del fuego. Hoy hemos comprobado que Dios puede hablar al hombre y quedar éste con vida. (Deuteronomio 5, 24)

  • Porque de todo ser viviente, ¿quién hay como nosotros que haya oído la voz del Dios vivo hablar de en medio del fuego y haya quedado con vida? (Deuteronomio 5, 26)

  • El Señor escuchó vuestras palabras cuando me hablabais, y me dijo: He oído las palabras de este pueblo. Todo lo que te ha dicho está bien. (Deuteronomio 5, 28)

  • Se trata de un pueblo numeroso, de estatura gigantesca, descendiente de los anaquitas, que tú ya conoces y de los cuales has oído decir: ¿Quién podrá mantenerse firme ante los hijos de Anac? (Deuteronomio 9, 2)

  • Si alguno, después de haber oído las palabras de este juramento, se hace ilusiones y dice: Todo me saldrá bien, aunque haga lo que me dé la gana, pues la abundancia de agua apaga la sed, (Deuteronomio 29, 18)


“Se quiser me encontrar, vá visitar Jesus Sacramentado; eu também estou sempre lá.” São Padre Pio de Pietrelcina