Znaleziono 542 Wyniki dla: nuestro

  • Quiero construir un templo grandioso, porque grande, más que todos los dioses, es nuestro Dios. (II Crónicas 2, 4)

  • Para nosotros, nuestro Dios es el Señor; no lo hemos abandonado; y los descendientes de Aarón son los sacerdotes al servicio del Señor, y los levitas cumplen sus funciones. (II Crónicas 13, 10)

  • Ofrecen diariamente holocaustos al Señor, mañana y tarde, queman perfumes aromáticos, ponen los panes de la proposición sobre la mesa limpia y encienden todas las tardes el candelabro de oro con sus lámparas; seguimos cumpliendo las disposiciones del Señor, nuestro Dios, que vosotros habéis abandonado. (II Crónicas 13, 11)

  • Asá invocó al Señor, su Dios: "Señor, solamente tú puedes acudir en auxilio del débil frente al poderoso. Ven en nuestro auxilio, Señor, Dios nuestro, porque en ti nos apoyamos y en tu nombre venimos a enfrentarnos con esta horda. Señor, tú eres nuestro Dios; no permitas que el hombre prevalezca contra ti". (II Crónicas 14, 10)

  • Tú, Señor, Dios nuestro, echaste a los habitantes de esta tierra para dársela a los hijos de Abrahán, tu amigo. (II Crónicas 20, 7)

  • Dios nuestro, júzgalos tú, pues nosotros nos sentimos impotentes frente a esta horda ingente que nos asalta. No sabemos qué hacer; nuestros ojos se vuelven a ti". (II Crónicas 20, 12)

  • Se levantaron de madrugada y salieron hacia el desierto de Técoa. Cuando salían, Josafat se adelantó y dijo: "Escuchadme, habitantes de Judá y de Jerusalén. Tened confianza en el Señor, Dios nuestro, y estaréis seguros; tened fe en sus profetas, y triunfaréis". (II Crónicas 20, 20)

  • Reunió a los sacerdotes y levitas y les dijo: "Recorred las ciudades de Judá y reunid fondos de todo Israel para reparar, según las necesidades de cada año, el templo de nuestro Dios. Sed diligentes en las obras". Pero los levitas no se mostraron diligentes. (II Crónicas 24, 5)

  • Sí, nuestros padres han pecado y han hecho lo que es malo a los ojos del Señor, nuestro Dios, lo han abandonado, han apartado su rostro de la morada del Señor y le han dado la espalda. (II Crónicas 29, 6)

  • Con él no hay más que brazos de carne; con nosotros está el Señor, nuestro Dios, pronto a socorrernos y combatir nuestros combates". El pueblo cobró ánimo con las palabras de Ezequías, rey de Judá. (II Crónicas 32, 8)

  • ¿No os dais cuenta de que Ezequías os está engañando y exponiendo a morir de hambre y de sed mientras os dice: El Señor, nuestro Dios, nos librará de la mano del rey de Asiria? (II Crónicas 32, 11)

  • y los mandé al jefe Idó, en Casifías, y les indiqué lo que debían decirle a él y a sus hermanos, establecidos en Casifías: que nos mandaran ministros para el templo de nuestro Dios. (Esdras 8, 17)


“Enquanto tiver medo de ser infiel a Deus, você não será’. Deve-se ter medo quando o medo acaba!” São Padre Pio de Pietrelcina