Znaleziono 149 Wyniki dla: habrá

  • los jefes amonitas dijeron a Janún: "¿Tú crees que David te envía consoladores con el fin de honrar a tu padre? ¿No los habrá enviado más bien con el fin de explorar, espiar y destruir el país?". (II Samuel 10, 3)

  • hago lo que has dicho. Te doy un corazón sabio y prudente, como no hubo antes de ti ni lo habrá después. (I Reyes 3, 12)

  • Añado además lo que no has pedido: riquezas y fama tales que no habrá en tus días rey alguno como tú. (I Reyes 3, 13)

  • Elías, el tesbita, de Tisbé, en Galaad, dijo a Ajab: "¡Vive el Señor, Dios de Israel, a cuyo servicio estoy!: en estos dos años no habrá lluvia ni rocío, mientras yo no lo diga". (I Reyes 17, 1)

  • Josafat repuso: "¿No habrá aquí algún otro profeta del Señor, para consultarle?". (I Reyes 22, 7)

  • Pero Josafat preguntó: "¿No habrá aquí algún profeta del Señor, para consultar al Señor por su medio?". Uno de los servidores del rey de Israel dijo: "Aquí está Eliseo, el hijo de Safat, el que vertía agua en las manos de Elías". (II Reyes 3, 11)

  • Y Ezequías respondió a Isaías: "Justa es la palabra del Señor que has pronunciado". Pensó: "Al menos en mis días habrá paz y seguridad". (II Reyes 20, 19)

  • los jefes amonitas dijeron a Janún: "¿Tú crees que David te envía consoladores con el fin de honrar a tu padre? ¿No los habrá enviado más bien con el fin de explorar, espiar y destruir el país?". (I Crónicas 19, 3)

  • Durante mucho tiempo Israel habrá de vivir lejos del Dios verdadero, sin sacerdotes que lo instruyan y sin ley; (II Crónicas 15, 3)

  • En aquellos días no habrá paz ni para los que salen ni para los que entran, pues abundarán las tribulaciones sobre todos los habitantes de la tierra. (II Crónicas 15, 5)

  • Josafat repuso: "¿No habrá aquí algún otro profeta del Señor para consultarle?". (II Crónicas 18, 6)

  • ¿Habrá que oír también que vosotros cometéis esta gran iniquidad de traicionar a nuestro Dios casándoos con mujeres extranjeras?". (Nehemías 13, 27)


“Onde há mais sacrifício, há mais generosidade.” São Padre Pio de Pietrelcina