Znaleziono 778 Wyniki dla: Judá

  • Judá repuso: "Que se quede con ello, para que no se burle de nosotros. Yo le he mandado el cabrito y tú no la has encontrado". (Génesis 38, 23)

  • Unos tres meses después le contaron a Judá: "Tu nuera Tamar se ha prostituido y ha quedado encinta". Judá dijo: "Que sea sacada y quemada". (Génesis 38, 24)

  • Judá los examinó y dijo: "Ella es más justa que yo, porque yo no le he dado por esposo a mi hijo Selá". Y ya no volvió a tener relaciones con ella. (Génesis 38, 26)

  • Judá le dijo: "Aquel hombre nos advirtió expresamente que no seríamos admitidos de nuevo en su presencia sin nuestro hermano menor. (Génesis 43, 3)

  • Entonces Judá dijo a su padre, Israel: "Deja venir conmigo al muchacho; salgamos inmediatamente, si queremos vivir y no morir nosotros, tú y nuestros hijos. (Génesis 43, 8)

  • Cuando Judá y sus hermanos llegaron a la casa de José, éste estaba todavía allí. Ellos se postraron ante él, (Génesis 44, 14)

  • Y Judá respondió: "¿Qué diremos a mi señor y cómo podremos justificarnos? Ha sido Dios quien ha descubierto la maldad de tus siervos. Aquí nos tienes como esclavos tuyos, tanto nosotros como aquel en cuyo poder fue encontrada la copa". (Génesis 44, 16)

  • Judá se acercó a él y le dijo: "Perdón, señor. Permite a tu siervo dirigir una palabra a mi señor, sin que por eso se irrite contra él, porque tú eres en verdad como el Faraón. (Génesis 44, 18)

  • Hijos de Judá: Er, Onán, Selá, Fares y Zéraj; pero Er y Onán habían muerto en la tierra de Canaán. (Génesis 46, 12)

  • Israel envió por delante a Judá al encuentro de José, para comunicarle que viniera a verle a Gosen. Ellos llegaron a la región de Gosen. (Génesis 46, 28)

  • A ti, Judá, te alabarán tus hermanos; tu mano, sobre la cerviz de tus enemigos; los hijos de tu padre se inclinarán ante ti. (Génesis 49, 8)

  • Cachorro de león es Judá, de hacer presa subes, hijo mío. Se encorva, se echa como un león, como leona; ¿quién podrá levantarlo? (Génesis 49, 9)


“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina