Znaleziono 1051 Wyniki dla: Aco

  • Aquella misma noche emborracharon a su padre, y fue la mayor y se acostó con él sin que éste se diera cuenta de que ella se acostaba y se levantaba. (Génesis 19, 33)

  • Aquella noche emborracharon también a su padre, y la menor se acostó con él; y tampoco se dio cuenta de que ella se acostaba y se levantaba. (Génesis 19, 35)

  • Por aquel tiempo Abimelec, acompañado por Picol, jefe de su ejército, fue a decir a Abrahán: "Dios está contigo en todo lo que haces. (Génesis 21, 22)

  • El Señor, Dios del cielo y de la tierra, que me sacó de la casa de mi padre y de la tierra de mi familia, que me habló y me juró diciéndome: Yo daré esta tierra a tu descendencia, él enviará su ángel delante de ti, para que tomes de allí mujer para mi hijo. (Génesis 24, 7)

  • El hombre fue a la casa. Labán desaparejó los camellos y les dio paja y forraje; a él y a sus acompañantes les trajo agua para que se lavaran los pies. (Génesis 24, 32)

  • No había acabado yo de hablar, y he aquí que salía Rebeca con su cántaro al hombro; bajó a la fuente y sacó agua. Yo le dije: Dame de beber. (Génesis 24, 45)

  • Sacó joyas de plata y oro y vestidos, y se lo dio a Rebeca. Hizo también ricos presentes a su hermano y a su madre. (Génesis 24, 53)

  • Comieron y bebieron él y sus acompañantes, y pasaron allí la noche. A la mañana siguiente, cuando se levantaron, él dijo: "Dejadme volver a mi amo". (Génesis 24, 54)

  • En seguida salió su hermano, con la mano agarrada al talón de Esaú, y le llamaron Jacob. Isaac tenía sesenta años cuando Rebeca los dio a luz. (Génesis 25, 26)

  • Los niños crecieron; Esaú llegó a ser un diestro cazador y hombre de campo, mientras que Jacob era hombre tranquilo y amante de la tierra. (Génesis 25, 27)

  • Isaac prefería a Esaú, porque la caza era plato de su gusto, mientras que Rebeca prefería a Jacob. (Génesis 25, 28)

  • Un día Jacob se había preparado un potaje, y Esaú volvía del campo; estaba agotado, y (Génesis 25, 29)


“Ele e ouvir a Sua voz por meio das Suas inspirações e iluminações interiores.” São Padre Pio de Pietrelcina