Znaleziono 230 Wyniki dla: nuestra

  • En efecto todo cuanto fue escrito en el pasado, se escribió para enseñanza nuestra, para que con la paciencia y el consuelo que dan las Escrituras mantengamos la esperanza. (Romanos 15, 4)

  • Os recomiendo a Febe, nuestra hermana, diaconisa de la Iglesia de Cencreas. (Romanos 16, 1)

  • sino que hablamos de una sabiduría de Dios, misteriosa, escondida, destinada por Dios desde antes de los siglos para gloria nuestra, (I Corintios 2, 7)

  • De todos modos, si alguien quiere discutir, no es ésa nuestra costumbre ni la de las Iglesias de Dios. (I Corintios 11, 16)

  • Porque parcial es nuestra ciencia y parcial nuestra profecía. (I Corintios 13, 9)

  • Y si no resucitó Cristo, vacía es nuestra predicación, vacía también vuestra fe. (I Corintios 15, 14)

  • Si solamente para esta vida tenemos puesta nuestra esperanza en Cristo, ¡somos los más dignos de compasión de todos los hombres! (I Corintios 15, 19)

  • que nos consuela en toda tribulación nuestra para poder nosotros consolar a los que están en toda tribulación, mediante el consuelo con que nosotros somos consolados por Dios! (II Corintios 1, 4)

  • Pues, así como abundan en nosotros los sufrimientos de Cristo, igualmente abunda también por Cristo nuestra consolación. (II Corintios 1, 5)

  • Es firme nuestra esperanza respecto de vosotros; pues sabemos que, como sois solidarios con nosotros en los sufrimientos, así lo seréis también en la consolación. (II Corintios 1, 7)

  • Pues hemos tenido sobre nosotros mismos la sentencia de muerte, para que no pongamos nuestra confianza en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos. (II Corintios 1, 9)

  • El motivo de nuestro orgullo es el testimonio de nuestra conciencia, de que nos hemos conducido en el mundo, y sobre todo respecto de vosotros, con la santidad y la sinceridad que vienen de Dios, y no con la sabiduría carnal, sino con la gracia de Dios. (II Corintios 1, 12)


“O medo excessivo nos faz agir sem amor, mas a confiança excessiva não nos deixa considerar o perigo que vamos enfrentar”. São Padre Pio de Pietrelcina