2. Un día, mientras celebraban el culto del Señor y ayunaban, el Espíritu Santo les dijo: «Sepárenme a Bernabé y a Saulo y envíenlos a realizar la misión para la que los he llamado.»





“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina