Carta de Judas, 1
11. ¡Desgraciados!, siguen los pasos de Caín, y por el dinero se extravían como Balaam: al fin perecerán como el revoltoso Coré.
11. ¡Desgraciados!, siguen los pasos de Caín, y por el dinero se extravían como Balaam: al fin perecerán como el revoltoso Coré.
“Há alegrias tão sublimes e dores tão profundas que não se consegue exprimir com palavras. O silêncio é o último recurso da alma, quando ela está inefavelmente feliz ou extremamente oprimida!” São Padre Pio de Pietrelcina