15. Y en pago de sus locos pensamientos de injusticia, que los extraviaron hasta hacerlos adorar reptiles sin razón y bestias despreciables, les enviaste como castigo una muchedumbre de animales irracionales,





“É doce o viver e o penar para trazer benefícios aos irmãos e para tantas almas que, vertiginosamente, desejam se justificar no mal, a despeito do Bem Supremo.” São Padre Pio de Pietrelcina