11. No dejamos de acordarnos de vosotros tanto en las solemnidades como en los demás días, en los sacrificios que ofrecemos y en las oraciones, pues es justo y conveniente recordar a los hermanos.





“Não se desencoraje, pois, se na alma existe o contínuo esforço de melhorar, no final o Senhor a premia fazendo nela florir, de repente, todas as virtudes como num jardim florido.” São Padre Pio de Pietrelcina