20. Herodes estaba irritado con los tirios y sidonios, que de común acuerdo se presentaron ante él, y habiéndose ganado a Blasto, que era camarero del rey, solicitaban la paz, porque su país se abastecía del país real.





“Pode-se manter a paz de espírito mesmo no meio das tempestades da vida”. São Padre Pio de Pietrelcina