Jeremías, 49
23. A Damasco. Avergonzadas están Jamat y Arpad. Porque una noticia mala oyeron, su corazón tembló de espanto; como el mar que no se puede calmar.
23. A Damasco. Avergonzadas están Jamat y Arpad. Porque una noticia mala oyeron, su corazón tembló de espanto; como el mar que no se puede calmar.
“Seria mais fácil a Terra existir sem o sol do que sem a santa Missa!” São Padre Pio de Pietrelcina