8. Pero él arrasó sus templos, taló sus bosques sagrados y destruyó todos sus dioses, para que adorasen solamente a Nabucodonosor, y todas las lenguas y todas las tribus le invocasen como dios.





“Nossa Senhora está sempre pronta a nos socorrer, mas por acaso o mundo a escuta e se emenda?” São Padre Pio de Pietrelcina