25. El Señor puso como frontera el Jordán entre nosotros y vosotros, los de Rubén y los de Gad. ¡Vosotros no tenéis parte en el Señor! Y así vuestros hijos harían que nuestros hijos no respetaran al Señor.





“É necessário manter o coração aberto para o Céu e aguardar, de lá, o celeste orvalho.” São Padre Pio de Pietrelcina