3. Sí, el Señor se compadece de Sión, se compadece de todas sus ruinas; convertirá su desierto en un edén, y su tierra seca en el jardín del Señor. Gritos de gozo y júbilo se oirán en ella, acción de gracias al son de la música.





“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraco com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina