7. Enseguida el Macabeo, tomando el primero las armas, exhortaba a los demás a unirse con él en el peligro para socorrer a sus hermanos.





“Não nos preocupemos quando Deus põe à prova a nossa fidelidade. Confiemo-nos à Sua vontade; é o que podemos fazer. Deus nos libertará, consolará e enorajará.” São Padre Pio de Pietrelcina