Eclesiástico, 40
30. En la boca del desvergonzado es dulce la mendicidad, pero es fuego que abrasa sus entrañas.
30. En la boca del desvergonzado es dulce la mendicidad, pero es fuego que abrasa sus entrañas.
“Não desperdice suas energias em coisas que geram preocupação, perturbação e ansiedade. Uma coisa somente é necessária: elevar o espírito e amar a Deus.” São Padre Pio de Pietrelcina