24. Después Daniel se presentó a Arioc, a quien el rey había encomendado el exterminio de los sabios de Babilonia, y le dijo: "¡No hagas perecer a los sabios de Babilonia! Llévame ante el rey y yo le daré la interpretación".





“Recorramos a Jesus e não às pessoas, pois só ele nunca nos faltará.” São Padre Pio de Pietrelcina