2. en ese mismo tiempo, el Señor habló por medio de Isaías, hijo de Amós, diciendo: "Ve, despójate del sayal que llevas ceñido, y quítate las sandalias de los pies". Él lo hizo así, y anduvo desnudo y descalzo.





“Pense na felicidade que está reservada para nós no Paraíso”. São Padre Pio de Pietrelcina