Fondare 25 Risultati per: voces

  • Todos los presentes clamaron entonces a grandes voces y bendijeron al Señor, que salva a todos los que esperan en él. (Daniel 13, 60)

  • Mas él, en cuanto se retiró, comenzó a divulgar a voces lo ocurrido, de manera que ya no podía Jesús entrar públicamente en ciudad alguna, sino que andaba fuera de poblado, en lugares solitarios, y acudían a él de todas partes. (Marcos 1, 45)

  • Al ver a Jesús, se puso a gritar y se postró ante él diciendo a voces: "¡Déjame en paz, Jesús, hijo del Dios altísimo! Te ruego que no me atormentes". (Lucas 8, 28)

  • Al acercarse a la bajada del monte de los Olivos, todos los que iban con él, llenos de alegría, comenzaron a alabar a Dios a grandes voces por todos los milagros que habían visto, (Lucas 19, 37)

  • Pero ellos insistían a grandes voces pidiendo que fuera crucificado, y sus gritos cada vez eran más fuertes. (Lucas 23, 23)

  • de muchos posesos salían los espíritus impuros dando grandes voces, y muchos paralíticos y cojos quedaban curados. (Hechos 8, 7)

  • Del trono salían rayos, voces y truenos. Siete lámparas de fuego ardían delante del trono (que son los siete espíritus de Dios). (Apocalipsis 4, 5)

  • Después el ángel tomó el incensario, lo llenó de fuego del altar y lo lanzó sobre la tierra. Entonces se produjeron truenos, relámpagos, voces y terremotos. (Apocalipsis 8, 5)

  • y gritó con voz potente, como el rugido del león. Cuando gritó, los siete truenos hicieron oír sus voces. (Apocalipsis 10, 3)

  • El séptimo ángel tocó la trompeta, y se oyeron en el cielo voces potentes que decían: El imperio del mundo ha pasado a nuestro señor y a su mesías; él reinará por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 11, 15)

  • Entonces se abrió el templo de Dios, el que está en el cielo, se vio en su templo el arca de su alianza en medio de rayos, voces, truenos, terremotos y fuerte granizada. (Apocalipsis 11, 19)

  • Y hubo relámpagos, voces y truenos, con un gran terremoto, como no lo hubo nunca de violento desde que el hombre está sobre la tierra. (Apocalipsis 16, 18)


“De todos os que vierem pedir meu auxílio, nunca perderei nenhum!” São Padre Pio de Pietrelcina