Fondare 454 Risultati per: delante

  • pondrá la mano sobre la cabeza de la víctima, la inmolará delante de la tienda de la reunión y los hijos de Aarón derramarán la sangre en torno del altar. (Levítico 3, 8)

  • Si su ofrenda es una cabra, la ofrecerá delante del Señor, (Levítico 3, 12)

  • pondrá la mano sobre su cabeza, la inmolará delante de la tienda de la reunión y los hijos de Aarón derramarán la sangre en torno del altar. (Levítico 3, 13)

  • Llevará el novillo delante del Señor a la entrada de la tienda de la reunión, le pondrá la mano sobre la cabeza y lo inmolará delante del Señor. (Levítico 4, 4)

  • mojará el dedo en la sangre y hará siete aspersiones hacia el velo del santuario delante del Señor; (Levítico 4, 6)

  • pondrá parte de ella sobre los cuernos del altar de los perfumes, que está delante del Señor en la tienda de la reunión, y derramará toda la sangre restante del novillo al pie del altar de los holocaustos, que se encuentra a la entrada de la tienda de la reunión. (Levítico 4, 7)

  • cuando sea descubierto el pecado cometido, la comunidad ofrecerá un novillo en sacrificio por el pecado, lo llevarán delante de la tienda de la reunión, (Levítico 4, 14)

  • los ancianos de la comunidad pondrán sus manos sobre la cabeza del novillo delante del Señor, y el novillo será inmolado delante del Señor. (Levítico 4, 15)

  • mojará el dedo en la sangre y hará siete aspersiones hacia el velo del santuario delante del Señor; (Levítico 4, 17)

  • pondrá parte de ella sobre los cuernos del altar que se encuentra delante del Señor en la tienda de la reunión, y derramará toda la sangre restante al pie del altar de los holocaustos, que está a la entrada de la tienda de la reunión. (Levítico 4, 18)

  • Pondrá su mano sobre la cabeza del macho cabrío y lo inmolará en el lugar donde se inmolan los holocaustos delante del Señor. Es un sacrificio por el pecado. (Levítico 4, 24)

  • es un sacrificio de reparación, porque este hombre era realmente culpable delante del Señor". (Levítico 5, 19)


“O demônio é forte com quem o teme, mas é fraquíssimo com quem o despreza.” São Padre Pio de Pietrelcina