Fondare 1928 Risultati per: ancianos de Israel

  • José subió a sepultar a su padre, y con él subieron todos los siervos del Faraón, los ancianos de su corte, todos los ancianos de Egipto (Génesis 50, 7)

  • José hizo jurar a los hijos de Israel así: "Ya que Dios vendrá ciertamente en vuestra ayuda, llevaréis de aquí mis huesos". (Génesis 50, 25)

  • "Anda, reúne a los ancianos de Israel y diles: El Señor, Dios de vuestros padres, el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob, se me ha aparecido y me ha dicho: Os he visitado y he visto lo que se os hace en Egipto. (Exodo 3, 16)

  • Ellos escucharán tu voz. Tú con los ancianos de Israel irás al rey de Egipto y le diréis: El Señor, Dios de los hebreos, se nos ha aparecido; déjanos ir a tres días de camino por el desierto para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios. (Exodo 3, 18)

  • Tú dirás al Faraón: Esto dice el Señor: Israel es mi hijo primogénito. (Exodo 4, 22)

  • Moisés y Aarón partieron y reunieron a todos los ancianos de los israelitas. (Exodo 4, 29)

  • Después de esto, Moisés y Aarón se presentaron ante el Faraón y le dijeron: "Esto dice el Señor, Dios de Israel: Deja ir a mi pueblo para que celebre una fiesta en el desierto". (Exodo 5, 1)

  • El Faraón dijo: "¿Quién es el Señor para que yo obedezca su voz y deje ir a Israel? No conozco al Señor y no dejaré ir a Israel". (Exodo 5, 2)

  • Éstas son sus cabezas de familia. Hijos de Rubén, primogénito de Israel: Henoc, Falú, Jesrón y Carmí. Tales son las familias de Rubén. (Exodo 6, 14)

  • Moisés respondió: "Hemos de ir todos, con nuestros jóvenes y nuestros ancianos, nuestros hijos y nuestras hijas, nuestras ovejas y nuestras vacas, porque para nosotros es una fiesta del Señor". (Exodo 10, 9)

  • Decid a toda la comunidad de Israel: El día diez de este mes cada uno se procure un cordero por familia, un cordero por casa. (Exodo 12, 3)

  • Lo guardaréis hasta el día catorce de este mes; entonces todo Israel lo inmolará entre dos luces. (Exodo 12, 6)


“O Senhor nos dá tantas graças e nós pensamos que tocamos o céu com um dedo. Não sabemos, no entanto, que para crescer precisamos de pão duro, das cruzes, das humilhações, das provações e das contradições.” São Padre Pio de Pietrelcina