Fondare 30 Risultati per: Salas

  • Midió después el muro del templo: tres metros, y la anchura de las salas laterales: dos metros, todo alrededor del templo. (Ezequiel 41, 5)

  • Las salas laterales estaban superpuestas, en tres pisos, una sobre otra. Treinta en cada piso. Para estribar las salas, en todo el círculo, había, en el muro del templo, salientes, de suerte que las salas no se incrustaban en el muro del templo. (Ezequiel 41, 6)

  • La anchura de las salas aumentaba a medida que se subía, porque el saliente del muro, en cada piso, giraba en torno al templo y así por arriba el templo dejaba a las salas una amplitud un poco mayor. Del piso inferior se podía subir al del medio, y de éste al superior. (Ezequiel 41, 7)

  • Observé que el templo estribaba alrededor sobre un basamento sobreelevado. Era la base de las salas laterales, que medía tres metros. (Ezequiel 41, 8)

  • El espesor del muro exterior de las salas era de dos metros y medio; quedaba un paso libre junto a las salas del templo. (Ezequiel 41, 9)

  • Entre las salas había una anchura de diez metros todo alrededor del templo. (Ezequiel 41, 10)

  • A cada lado de los muros laterales del vestíbulo había ventanas enrejadas y palmeras, así como salas anejas al templo y arquitrabes. (Ezequiel 41, 26)

  • y por delante de las salas pasaba un corredor de cinco metros de ancho hacia el interior y cien codos de largo; sus puertas daban al norte. (Ezequiel 42, 4)

  • Las salas superiores del edificio, al quitarles las galerías parte de su espacio, eran más estrechas que las inferiores y las intermedias. (Ezequiel 42, 5)

  • La cerca exterior, paralela a las salas por el lado del atrio exterior, tenía veinticinco metros de longitud. (Ezequiel 42, 7)

  • En efecto, la longitud de las salas que daban al atrio exterior era de veinticinco metros, mientras que por el lado de la fachada del santuario era de cincuenta metros. (Ezequiel 42, 8)

  • Debajo de las salas estaba la entrada, mirando al oriente para el que entraba viniendo del atrio exterior. (Ezequiel 42, 9)


“Reze, reze! Quem muito reza se salva e salva os outros. E qual oração pode ser mais bela e mais aceita a Nossa Senhora do que o Rosario?” São Padre Pio de Pietrelcina