Fondare 1561 Risultati per: Casa

  • el sacerdote entrará para someterla a un nuevo examen; y si la mancha se ha extendido por la casa, entonces se trata de lepra maligna: la casa es impura. (Levítico 14, 44)

  • El que entró en la casa mientras estuvo clausurada será impuro hasta la tarde. (Levítico 14, 46)

  • El que durmió en la casa deberá lavar su ropa, y lo mismo hará el que comió en ella. (Levítico 14, 47)

  • Pero si el sacerdote, al examinar la mancha, ve que esta no se ha extendido por la casa después que fue revocada de nuevo, tendrá que declararla pura, porque la mancha ha desaparecido. (Levítico 14, 48)

  • Luego tomará dos pájaros, un trozo de madera de cedro, una cinta de púrpura escarlata y un ramillete de hisopo, para eliminar el pecado de la casa. (Levítico 14, 49)

  • Después tomará la madera de cedro, el hisopo, la púrpura escarlata y el pájaro vivo: los sumergirá en la sangre del pájaro inmolado y en el agua del manantial, y hará siete aspersiones sobre la casa. (Levítico 14, 51)

  • Y una vez eliminado el pecado de la casa con la sangre del pájaro, con el agua del manantial, con el pájaro vivo, con la madera de cedro, con el hisopo y con la púrpura escarlata, (Levítico 14, 52)

  • dejará en libertad al pájaro vivo, fuera de la ciudad, en pleno campo. Así realizará el rito de expiación por la casa, y esta quedará purificada. (Levítico 14, 53)

  • Si un hombre de la casa de Israel inmola un buey, una oveja o una cabra dentro del campamento o fuera de él, (Levítico 17, 3)

  • Diles además: Si un hombre de la casa de Israel o alguno de los extranjeros que residen en medio de ustedes, ofrece un holocausto o un sacrificio, (Levítico 17, 8)

  • Si un hombre de la casa de Israel o alguno de los extranjeros que residen en medio de ustedes, come cualquier clase de sangre, yo volveré mi rostro contra esa persona y la excluiré de su pueblo. (Levítico 17, 10)

  • No tendrás relaciones con tu hermana, sea hija de tu padre o de tu madre, sea que haya nacido en la casa o fuera de ella. (Levítico 18, 9)


“Nas tentações, combata com coragem! Nas quedas, humilhe-se mas não desanime!” São Padre Pio de Pietrelcina