Fondare 169 Risultati per: Llegaron

  • Saúl se disfrazó y fue a verla acompañado por dos de sus hombres. Llegaron por la noche donde la mujer y Saúl le dijo: «Consulta al espíritu del que yo te diga.» (1 Samuel 28, 8)

  • Cuando, al tercer día, David y sus hombres llegaron a Siquelag, los amalecitas habían pasado por allí recorriendo el país de Negueb. Habían entrado en Siquelag y la habían incendiado, (1 Samuel 30, 1)

  • Cuando David y sus hombres llegaron a la ciudad, vieron que había sido incendiada y que habían desaparecido sus mujeres y sus hijos. (1 Samuel 30, 3)

  • Joab y Abisaí continuaron la persecución de Abner; al atardecer, llegaron a Ammá, que está al oriente de Guiaj, sobre el camino del desierto de Gabaón. (2 Samuel 2, 24)

  • Abner y sus hombres marcharon toda la noche por la Arabá, pasaron el Jordán y después de atravesar el Bitrón llegaron a Majanayim. (2 Samuel 2, 29)

  • Llevaron a Asael y lo sepultaron en el sepulcro de su padre, en Belén. Luego Joab y sus hombres caminaron toda la noche y al amanecer llegaron a Hebrón. (2 Samuel 2, 32)

  • Cuando llegaron Joab y sus hombres, le dijeron a Joab que Abner había visitado al rey y que éste, después de recibirlo, lo había dejado ir en paz. (2 Samuel 3, 23)

  • Los hijos de Rimón de Beerot, Recab y Baamá, se pusieron en camino y en la hora de más calor del día llegaron a casa de Isbaal, que estaba durmiendo la siesta. (2 Samuel 4, 5)

  • Al saberlo, David bajó a la fortaleza. Los filisteos llegaron y se desplegaron en el valle de Refaím. (2 Samuel 5, 18)

  • El rey salió con el pueblo y se detuvo cuando llegaron a la última casa de la ciudad. (2 Samuel 15, 17)

  • Llegaron agotados a un lugar donde recuperaron las fuerzas. (2 Samuel 16, 14)

  • Llegaron y sitiaron Abel-Bet-Maaká, donde estaba Sebá. Levantaron un terraplén frente a la muralla de la ciudad y todo el ejército que seguía a Joab cavaba debajo de la muralla para hacerla caer. (2 Samuel 20, 15)


“A sua função é tirar e transportar as pedras, e arrancar os espinhos. Jesus é quem semeia, planta, cultiva e rega. Mas seu trabalho também é obra de Jesus. Sem Ele você nada pode fazer.” São Padre Pio de Pietrelcina