13. Ageo prosiguió: «Si uno, en cambio, queda impuro por haber tocado un cadáver y roza luego algunas de estas cosas, ¿quedarán todas impuras?» Los sacerdotes dijeron esta vez: «Sí.»





“Se precisamos ter paciência para suportar os defeitos dos outros, quanto mais ainda precisamos para tolerar nossos próprios defeitos!” São Padre Pio de Pietrelcina