Romanos, 3
28. Decimos, pues, con razón, que el hombre es justificado por la fe sin la observancia de la ley.
28. Decimos, pues, con razón, que el hombre es justificado por la fe sin la observancia de la ley.
“O meu passado, Senhor, à Tua misericórdia. O meu Presente, ao Teu amor. O meu futuro, à Tua Providência.” São Padre Pio de Pietrelcina