47. si ellos, volviendo en sí en el país a que hayan sido deportados, se convierten y te suplican en la tierra de su cautividad, diciendo: Hemos pecado, hemos obrado inicua e injustamente;





“Desapegue-se daquilo que não é de Deus e não leva a Deus”. São Padre Pio de Pietrelcina