28. Murió en buena vejez, lleno de días, de riqueza y de gloria. Le sucedió en el trono su hijo Salomón.





“Queira o dulcíssimo Jesus conservar-nos na Sua graça e dar-nos a felicidade de sermos admitidos, quando Ele quiser, no eterno convívio…” São Padre Pio de Pietrelcina