12. Cuando el príncipe haga una ofrenda voluntaria al Señor, sea holocausto y sacrificio de reconciliación, se le abrirá la puerta que da a oriente, ofrecerá su holocausto o su sacrificio de reconciliación según el mismo ceremonial de los días de sábado, saldrá luego y la puerta se cerrará cuando haya salido.





“Imitemos o coração de Jesus, especialmente na dor, e assim nos conformaremos cada vez mais e mais com este coração divino para que, um dia, lá em cima no Céu, também nós possamos glorificar o Pai celeste ao lado daquele que tanto sofreu”. São Padre Pio de Pietrelcina