6. Ellos tienen poder para cerrar el cielo con el fin de que no llueva durante los días de su predicación; tienen asimismo poder sobre las aguas para cambiarlas en sangre, y poder para herir a la tierra con toda clase de plagas todas las veces que quieran.





“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina