6. Las piedras lisas del torrente son tu parte: ¡sí, ellas te han tocado en suerte! En su honor has derramado libaciones, has presentado ofrendas, y yo ¿me dejaré aplacar con esas cosas?





“Tenhamos sempre horror ao pecado mortal e nunca deixemos de caminhar na estrada da santa eternidade.” São Padre Pio de Pietrelcina