Talált 11468 Eredmények: mí
Estos son una vergüenza para vuestras comidas fraternas, comen y beben desvergonzadamente, cebándose a sí mismos. Nubes sin agua arrastradas por el viento; arboles infructuosos en el otoño, dos veces muertos, arrancados de cuajo; (Judas 1, 12)
Ya profetizó de ellos Henoc, séptimo patriarca después de Adán, diciendo: Mirad, el Señor viene con miles y miles de ángeles (Judas 1, 14)
a entablar juicio contra todos y a condenar a todos los criminales por todos los crímenes que cometieron y por todas las blasfemias que estos pecadores pronunciaron contra él. (Judas 1, 15)
Pero vosotros, queridos míos, acordaos de las palabras que os predijeron los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo. (Judas 1, 17)
Vosotros, en cambio, queridos, asentaos en el cimiento de vuestra santa fe, orad en el Espíritu Santo; (Judas 1, 20)
conservaos en el amor de Dios, aguardando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para la vida eterna. (Judas 1, 21)
Miradlo, viene entre nubes; lo verán todos, aun los que lo traspasaron, y se lamentarán sobre él todas las naciones de la tierra. Sí. Amén. (Apocalipsis 1, 7)
Yo, Juan, vuestro hermano y vuestro compañero en el sufrimiento, en el reino y en la constancia, en Jesús, yo me encontraba en la isla de Patmos por haber predicado la palabra de Dios y por haber dado testimonio de Jesús. (Apocalipsis 1, 9)
Caí en éxtasis el día del Señor y oí detrás de mí una voz potente como de trompeta, (Apocalipsis 1, 10)
que decía: "Lo que ves escríbelo en un libro y mándaselo a las siete Iglesias: a Éfeso, a Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardes, Filadelfia y Laodicea". (Apocalipsis 1, 11)
Al verle, caí a sus pies como muerto; pero él me tocó con su mano derecha, y me dijo: "No tengas miedo; soy yo, el primero y el último, el viviente; (Apocalipsis 1, 17)
Éste es el secreto de las siete estrellas que has visto en mi mano derecha y de los siete candelabros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete Iglesias, y los siete candelabros son las siete Iglesias". (Apocalipsis 1, 20)