Talált 495 Eredmények: horno de fuego

  • Y se dijeron unos a otros: "Ea, hagamos ladrillos y cozámoslos al fuego". Se sirvieron de los ladrillos en lugar de piedras, y de betún en lugar de argamasa. (Génesis 11, 3)

  • Cuando se puso el sol, apareció entre densísimas tinieblas una hornilla humeante y una llama de fuego, que pasó por entre los animales partidos. (Génesis 15, 17)

  • Entonces el Señor hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego del Señor desde el cielo. (Génesis 19, 24)

  • Volvió la vista hacia Sodoma y Gomorra y hacia toda la vega, y vio cómo de la vega subía humo como el de un horno. (Génesis 19, 28)

  • Abrahán tomó la leña del holocausto y la puso sobre el hombro de su hijo Isaac. Después tomó en su mano el fuego y el cuchillo, y se fueron los dos juntos. (Génesis 22, 6)

  • Isaac dijo a su padre: "¡Padre!". Él respondió: "¿Qué quieres, hijo mío?". Isaac dijo: "Llevamos el fuego y la leña; pero ¿dónde está el cordero para el holocausto?". (Génesis 22, 7)

  • Allí se le apareció el ángel del Señor en llama de fuego, en medio de una zarza. Miró, y vio que la zarza ardía sin consumirse. (Exodo 3, 2)

  • El Señor dijo a Moisés y a Aarón: "Tomad un puñado de ceniza de horno y que Moisés la tire al aire en presencia del Faraón. (Exodo 9, 8)

  • Tomaron ceniza de horno y, presentándose ante el Faraón, Moisés la esparció por el aire y produjo úlceras y tumores en hombres y animales. (Exodo 9, 10)

  • Moisés extendió su bastón hacia el cielo, y el Señor mandó truenos y granizo con fuego, que se precipitaba sobre la tierra; el Señor hizo caer granizo sobre Egipto. (Exodo 9, 23)

  • Esa misma noche comeréis la carne asada al fuego, con panes sin levadura y hierbas amargas. (Exodo 12, 8)

  • No comeréis nada crudo ni cocido en agua; todo ha de ser asado al fuego: cabeza, patas y entrañas. (Exodo 12, 9)


“Nossa Senhora recebeu pela inefável bondade de Jesus a força de suportar até o fim as provações do seu amor. Que você também possa encontrar a força de perseverar com o Senhor até o Calvário!” São Padre Pio de Pietrelcina