Talált 814 Eredmények: deseo de vida

  • manteniendo firme la palabra de vida, de modo que pueda presumir en el día de Cristo de no haber corrido ni trabajado inútilmente. (Filipenses 2, 16)

  • que por la obra de Cristo estuvo a punto de morir poniendo en peligro su vida para proporcionarme en vuestra ausencia los servicios que vosotros no me podíais prestar. (Filipenses 2, 30)

  • Y a ti, leal compañero, te ruego que prestes tu ayuda a éstas, que han trabajado mucho en el evangelio conmigo y con Clemente y demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida. (Filipenses 4, 3)

  • Y a vosotros, que estabais muertos por vuestras faltas y por no haber dominado los apetitos carnales, os volvió a dar la vida juntamente con él, y nos ha perdonado todos los pecados. (Colosenses 2, 13)

  • Vosotros habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios. (Colosenses 3, 3)

  • Cuando Cristo se manifieste, él que es vuestra vida, entonces vosotros también apareceréis con él en la gloria. (Colosenses 3, 4)

  • y que practicabais en vuestra vida pasada. (Colosenses 3, 7)

  • así, en nuestra ternura hacia vosotros, hubiéramos querido entregaros, al mismo tiempo que el evangelio de Dios, nuestra propia vida. ¡Tanto os queríamos! (I Tesalonicenses 2, 8)

  • y así os exhortábamos, os animábamos y os alentábamos a llevar una vida digna de Dios, que os llama a su reino y a su gloria. (I Tesalonicenses 2, 12)

  • Nosotros, hermanos, en este breve espacio de tiempo que hemos estado separados de vosotros, aunque espiritualmente no lo hemos estado, hemos sentido un deseo todavía más vivo de volver a veros. (I Tesalonicenses 2, 17)

  • Así llevaréis una vida honrada a los ojos de los de fuera y no tendréis necesidad de nadie. (I Tesalonicenses 4, 12)

  • a Timoteo, verdadero hijo en la fe. Te deseo la gracia, la misericordia y la paz de Dios Padre y de Jesucristo, nuestro Señor. (I Timoteo 1, 2)


“Vive-se de fé, não de sonhos.” São Padre Pio de Pietrelcina