Talált 3022 Eredmények: construir casa sobre arena

  • Ellos tienen poder para cerrar el cielo con el fin de que no llueva durante los días de su predicación; tienen asimismo poder sobre las aguas para cambiarlas en sangre, y poder para herir a la tierra con toda clase de plagas todas las veces que quieran. (Apocalipsis 11, 6)

  • Otra señal apareció en el cielo: un dragón color de fuego, con siete cabezas y diez cuernos; sobre sus cabezas, siete diademas; (Apocalipsis 12, 3)

  • su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo y las lanzó sobre la tierra. El dragón se puso delante de la mujer en trance de dar a luz, para devorar al hijo tan pronto como le diera a luz. (Apocalipsis 12, 4)

  • El dragón, al verse precipitado sobre la tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al varón. (Apocalipsis 12, 13)

  • El dragón se plantó sobre la arena del mar. (Apocalipsis 12, 18)

  • Entonces vi surgir del mar una bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas; sobre sus cuernos tenía diez diademas, y sobre sus cabezas nombres blasfemos. (Apocalipsis 13, 1)

  • Y le permitieron hacer la guerra a los santos y vencerlos; le dieron poder sobre toda raza, pueblo, lengua y nación. (Apocalipsis 13, 7)

  • Después vi al cordero, que estaba en pie sobre el monte Sión, acompañado de ciento cuarenta y cuatro mil personas que tenían escrito en las frentes su nombre y el nombre de su Padre. (Apocalipsis 14, 1)

  • Después vi una nube blanca, y sobre la nube sentado como un hijo del hombre, con una corona de oro en la cabeza y una hoz afilada en su mano. (Apocalipsis 14, 14)

  • Salió otro ángel del templo, gritando con voz potente al que estaba sentado sobre la nube: "Echa tu hoz y siega, porque ha llegado la hora de la siega, pues está seca la mies de la tierra". (Apocalipsis 14, 15)

  • Y el que estaba sentado sobre la nube echó su hoz sobre la tierra, y la tierra quedó segada. (Apocalipsis 14, 16)

  • Salió todavía del altar otro ángel, el que tiene poder sobre el fuego, y gritó con voz potente al que tenía la hoz afilada: "Echa tu hoz afilada y vendimia los racimos de la viña de la tierra, pues la uva está madura". (Apocalipsis 14, 18)


“A divina bondade não só não rejeita as almas arrependidas, como também vai em busca das almas teimosas”. São Padre Pio de Pietrelcina