Talált 14 Eredmények: casada

  • Pero Dios visitó a Abimelec en sueños, de noche, y le dijo: "Vas a morir a causa de la mujer que has tomado, porque es una mujer casada". (Génesis 20, 3)

  • En cuanto al hombre que comete adulterio con una mujer casada: el hombre que comete adulterio con la mujer de su prójimo, será castigado con la muerte, él y la mujer. (Levítico 20, 10)

  • No debe hacerse impuro ni mancharse por una pariente casada. (Levítico 21, 4)

  • La hija de un sacerdote casada con un extraño no podrá comer las cosas santas; (Levítico 22, 12)

  • Si un hombre es sorprendido acostado con una mujer casada, los dos serán condenados a muerte. Así extirparás la maldad de en medio de ti. (Deuteronomio 22, 22)

  • Así, mandó emisarios a Demetrio con este mensaje: "Ven y hagamos un pacto; te daré a mi hija casada con Alejandro, y reinarás en el trono de tu padre. (I Macabeos 11, 9)

  • No te sientes jamás junto a mujer casada, ni te pongas a la mesa con ella a beber vino, no sea que se incline hacia ella tu corazón, y por tu pasión te lleve a la ruina. (Eclesiástico 9, 9)

  • Mujer que se vende vale un comino, la casada es torre de la muerte para los que la gozan; (Eclesiástico 26, 22)

  • Una hija es una secreta causa de cuidados para su padre, un cuidado que quita el sueño; de joven, para que no se marchite; de casada, para que no llegue a ser aborrecida; (Eclesiástico 42, 9)

  • Grita de alegría, estéril, que no has dado a luz, prorrumpe en gritos de gozo y algazara, tú que no has estado de parto. Pues son más numerosos los hijos de la abandonada que los hijos de la casada -dice el Señor-. (Isaías 54, 1)

  • Ninguno de ellos se acercará a un cadáver para no contaminarse. Pero podrán contaminarse con el cadáver del padre o de la madre, de un hijo o una hija, de un hermano o una hermana aún no casada. (Ezequiel 44, 25)

  • La mujer casada está atada por la ley al marido mientras éste vive; pero si muere el marido, queda desligada de la ley del matrimonio. (Romanos 7, 2)


“Cada Missa lhe obtém um grau mais alto de gloria no Céu!” São Padre Pio de Pietrelcina