Talált 365 Eredmények: agua

  • Gedeón hizo bajar sus tropas al agua, y el Señor le dijo: "A todos los que lamen el agua de su mano como la lamen los perros, ponlos a un lado; y a todos los que se arrodillan para beber, ponlos a otro". (Jueces 7, 5)

  • Los que lamieron el agua de sus manos fueron trescientos. El resto del pueblo se arrodilló para beber. (Jueces 7, 6)

  • El Señor dijo a Gedeón: "Con los trescientos hombres que han lamido el agua os libraré y pondré a los madianitas en tus manos. Que todos los demás se vayan cada uno a su casa". (Jueces 7, 7)

  • El Señor abrió la pila que hay en Lejí, y salió de ella agua. Sansón bebió y se reanimó. Por eso a la fuente de Lejí se la llama hasta la fecha En Hacoré. (Jueces 15, 19)

  • Se reunieron en Mispá, sacaron agua y la derramaron ante el Señor, ayunaron aquel día y dijeron: "Hemos pecado contra el Señor". Y Samuel fue juez de los israelitas en Mispá. (I Samuel 7, 6)

  • Cuando subían por la cuesta de la ciudad, se encontraron a unas jóvenes que salían a coger agua, y les preguntaron: "¿Está aquí el vidente?". ( (I Samuel 9, 11)

  • ¿Voy a tomar yo mi pan, mi agua y la carne de los animales que he matado para mis esquiladores, y se lo voy a dar a unos hombres que no sé de dónde son?". (I Samuel 25, 11)

  • Pero que el Señor aleje de mí el pensamiento de poner mi mano en el ungido del Señor. Anda; coge su lanza y el jarro de agua, y vámonos". (I Samuel 26, 11)

  • David tomó de la cabecera de Saúl la lanza y el jarro de agua y se fueron. Nadie los vio; nadie se dio cuenta; nadie se despertó, pues todos dormían, porque el Señor había hecho caer sobre ellos un profundo sueño. (I Samuel 26, 12)

  • No está bien lo que has hecho. Vive el Señor, que merecéis la muerte por no haber guardado a vuestro señor, el ungido del Señor. ¿Dónde está la lanza del rey y el jarro de agua que tenía a su cabecera?". (I Samuel 26, 16)

  • Porque todos morimos y somos como agua derramada en tierra y que no puede recogerse. Dios no quita la vida, ni quiere que el fugitivo esté exiliado lejos de él. (II Samuel 14, 14)

  • Puso a su alrededor la oscuridad por tienda, agua tenebrosa y densas nubes. (II Samuel 22, 12)


“Quando fizer o bem, esqueça. Se fizer o mal, pense no que fez e se arrependa.” São Padre Pio de Pietrelcina