Talált 2118 Eredmények: Reino de Israel

  • Uno de los convidados, al oír esto, le dijo: "Dichoso el que participe en el convite del reino de Dios". (Lucas 14, 15)

  • La ley y los profetas llegan hasta Juan; desde entonces se anuncia el reino de Dios y todos se esfuerzan para entrar en él. (Lucas 16, 16)

  • Los fariseos le preguntaron cuándo iba a llegar el reino de Dios. Él respondió: "La llegada del reino de Dios no será espectacular. (Lucas 17, 20)

  • No se dirá: Está aquí o allí, porque el reino de Dios está dentro de vosotros". (Lucas 17, 21)

  • Pero Jesús los llamó y dijo: "Dejad que los niños se acerquen a mí y no se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el reino de Dios. (Lucas 18, 16)

  • Os aseguro que el que no reciba el reino de Dios como un niño no entrará en él". (Lucas 18, 17)

  • Jesús dijo al verlo tan triste: "¡Qué difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! (Lucas 18, 24)

  • Pues es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el reino de Dios". (Lucas 18, 25)

  • Jesús dijo: "Os aseguro que nadie deja casa, mujer, hermanos, parientes e hijos por el reino de Dios, (Lucas 18, 29)

  • Como la gente lo escuchaba, les propuso una parábola, ya que estaban cerca de Jerusalén y creían que la manifestación del reino de Dios era inminente. (Lucas 19, 11)

  • Así también vosotros, cuando veáis todo esto, sabed que el reino de Dios está cerca. (Lucas 21, 31)

  • Os digo que ya no la comeré hasta que se cumpla en el reino de Dios". (Lucas 22, 16)


“Se quisermos colher é necessário não só semear, mas espalhar as sementes num bom campo. Quando as sementes se tornarem plantas, devemos cuidá-las para que as novas plantas não sejam sufocadas pelas ervas daninhas.” São Padre Pio de Pietrelcina