Talált 368 Eredmények: Jacob
El mozo no titubeó en hacerlo, porque estaba enamorado de la hija de Jacob, y era el más considerado de la casa de su padre. (Génesis 34, 19)
Al tercer día, cuando el dolor era más fuerte, dos de los hijos de Jacob, Simeón y Leví, hermanos de Dina, tomaron cada uno su espada, entraron a mansalva en la ciudad y mataron a todos los varones. (Génesis 34, 25)
Los hijos de Jacob acometieron a todos los heridos y saquearon la ciudad por haber deshonrado a su hermana. (Génesis 34, 27)
Jacob dijo a Simeón y Leví: "Me habéis puesto en gran aprieto, haciéndome odioso a los hombres de esta tierra, a los cananeos y a los fereceos. Yo cuento con pocos hombres; ellos se unirán, me vencerán y seré aniquilado yo con toda mi casa". (Génesis 34, 30)
Dios dijo a Jacob: "Levántate, vete a vivir a Betel y levanta allí un altar al Dios que se te apareció cuando huías de la presencia de tu hermano Esaú". (Génesis 35, 1)
Jacob dijo a su familia y a todos los que estaban con él: "Tirad los dioses extranjeros que hay en medio de vosotros, purificaos y cambiad vuestros vestidos. (Génesis 35, 2)
Ellos dieron a Jacob todos los dioses extranjeros que poseían y los anillos que llevaban en las orejas, y Jacob los enterró bajo la encina que hay cerca de Siquén. (Génesis 35, 4)
Levantaron el campamento, y un terror divino cayó sobre las ciudades de los alrededores, por lo que nadie persiguió a los hijos de Jacob. (Génesis 35, 5)
Llegó Jacob a Luz, en tierra de Canaán, o sea a Betel, él y toda la gente que estaba con él. (Génesis 35, 6)
Dios se apareció de nuevo a Jacob, a su vuelta de Padán Arán, y le bendijo (Génesis 35, 9)
diciendo: "Tu nombre es Jacob, pero ya no te llamarás Jacob; tu nombre será Israel". Y le llamó Israel. (Génesis 35, 10)
Jacob levantó una estela en el lugar en que Dios le había hablado; una estela de piedra, sobre la que vertió vino y aceite. (Génesis 35, 14)