Talált 2426 Eredmények: Ala

  • Guardarás la fiesta de los panes sin levadura. Durante siete días comerás panes sin levadura, como yo te mandé, en el tiempo señalado del mes de abib, porque en él salisteis de Egipto. Nadie se presente a mí con las manos vacías. (Exodo 23, 15)

  • Moisés vino y comunicó al pueblo todas las palabras del Señor y todas sus leyes relativas a la administración de la justicia. Y todo el pueblo respondió a una voz: "Nosotros cumpliremos todo cuanto ha dicho el Señor". (Exodo 24, 3)

  • Moisés escribió todas las palabras del Señor, se levantó de madrugada y edificó un altar al pie de la montaña y doce estelas por las doce tribus de Israel. (Exodo 24, 4)

  • Moisés tomó la sangre y la derramó sobre el pueblo diciendo: "Ésta es la sangre de la alianza que el Señor ha hecho con vosotros mediante todas estas palabras". (Exodo 24, 8)

  • Los querubines tendrán sus alas extendidas hacia arriba cubriendo con ellas el propiciatorio, estando sus rostros uno frente al otro y mirando hacia el propiciatorio. (Exodo 25, 20)

  • Lo pones todo en las manos de Aarón y de sus hijos, para que hagan la ceremonia del balanceo delante del Señor. (Exodo 29, 24)

  • Tomas el pecho del carnero de investidura, perteneciente a Aarón, y haces la ceremonia del balanceo ante el Señor. Ello será tu porción. (Exodo 29, 26)

  • De este modo consagrarás el pecho de balanceo y el muslo de elevación, esto es, lo balanceado y elevado del carnero de consagración, reservado a Aarón y a sus hijos. (Exodo 29, 27)

  • Harás con ellos un incienso perfumado, trabajo de perfumista, salado, puro y santo. (Exodo 30, 35)

  • ¿Por qué van a poder decir los egipcios: Con muy mala intención los hizo salir, para hacerlos perecer en las montañas y exterminarlos de la superficie de la tierra? Aplaca tu ira y arrepiéntete de la amenaza contra tu pueblo. (Exodo 32, 12)

  • El pueblo oyó estas duras palabras e hizo duelo; nadie se vistió de gala. (Exodo 33, 4)

  • El Señor dijo a Moisés: "Di a los israelitas: Vosotros sois un pueblo de cabeza dura; si por un solo momento subiese en medio de vosotros, os aniquilaría. Quítate, pues, tus galas, que yo sabré cómo he de tratarte". (Exodo 33, 5)


“A cada vitória sobre o pecado corresponde um grau de glória eterna”. São Padre Pio de Pietrelcina