Talált 2426 Eredmények: Ala
El Señor dijo a Moisés: "Vuelve a poner la vara de Aarón delante del testimonio y consérvala como señal para los hijos rebeldes, para que cesen sus quejas contra mí y no mueran". (Números 17, 25)
Lo podréis comer en cualquier lugar, vosotros y los vuestros: es el salario por vuestro servicio en la tienda de la reunión. (Números 18, 31)
El pueblo se quejaba contra Moisés, diciendo: "¡Ojalá hubiéramos muerto como murieron nuestros hermanos delante del Señor! (Números 20, 3)
Balac, hijo de Sipor, vio todo lo que Israel había hecho con los amorreos, (Números 22, 2)
Moab dijo a los ancianos de Madián: "Esta muchedumbre va a devorar ahora nuestros contornos como devora un buey la hierba del campo". Era entonces rey de Moab Balac, hijo de Sipor, (Números 22, 4)
el cual envió mensajeros a Petor, junto al río Éufrates, en tierra de los amonitas, que fueron a buscar a Balaán, hijo de Beor, diciendo: "Ha salido de Egipto un pueblo que cubre toda la tierra y está ya cerca de mí. (Números 22, 5)
Los ancianos de Moab y de Madián partieron llevando consigo el precio del agüero. Llegaron a Balaán y le comunicaron las palabras de Balac. (Números 22, 7)
Él les dijo: "Pasad aquí la noche, y yo os responderé según lo que me diga el Señor". Los príncipes de Moab se quedaron con Balaán. (Números 22, 8)
Dios se apareció a Balaán, y le dijo: "¿Quiénes son estos hombres que están contigo?". (Números 22, 9)
Balaán respondió a Dios: "Balac, hijo de Sipor, rey de Moab, los ha enviado a decirme: (Números 22, 10)
Dios dijo a Balaán: "Tú no irás con ellos ni maldecirás a ese pueblo, que es bendito". (Números 22, 12)
Balaán se levantó de mañana y dijo a los jefes que había enviado Balac: "Partid para vuestra tierra, pues el Señor no me deja ir con vosotros". (Números 22, 13)