Talált 46 Eredmények: volveré

  • A pesar de eso, ustedes me abandonaron y sirvieron a otros dioses. Por eso, no volveré a salvarlos. (Jueces 10, 13)

  • Samuel respondió a Saúl: "No volveré contigo, porque tú has rechazado la palabra del Señor, y él te ha rechazado a ti para que ya no seas más rey de Israel". (I Samuel 15, 26)

  • y exclamó: "Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allí. El Señor me lo dio y el Señor me lo quitó: ¡bendito sea el nombre del Señor!". (Job 1, 21)

  • Tú solo tienes que decir a Dios: "Yo fui seducido, no volveré a hacer el mal; (Job 34, 31)

  • ¿Por qué te deprimes, alma mía? ¿Por qué te inquietas? Espera en Dios, y yo volveré a darle gracias, a él, que es mi salvador y mi Dios. (Salmos 42, 6)

  • ¿Por qué te deprimes, alma mía? ¿Por qué te inquietas? Espera en Dios, y yo volveré a darle gracias, a él, que es mi salvador y mi Dios. (Salmos 42, 12)

  • ¿Por qué te deprimes, alma mía? ¿Por qué te inquietas? Espera en Dios, y yo volveré a darle gracias, a él, que es mi salvador y mi Dios. (Salmos 43, 5)

  • "Me han golpeado, pero no me dolió; me han pegado, pero no me di cuenta. ¿Cuándo me despertaré? ¡Volveré a pedir más todavía!". (Proverbios 23, 35)

  • Volveré mi mano contra ti, depuraré tu escoria con potasa y eliminaré todos tus desechos. (Isaías 1, 25)

  • Volveré mi rostro contra ese hombre, haré que sirva de escarmiento y de ejemplo, y lo extirparé de en medio de mi pueblo. Así ustedes sabrán que yo soy el Señor. (Ezequiel 14, 8)

  • Yo, el Señor, he hablado y esto sucederá; obraré y no me volveré atrás, no tendré compasión ni me arrepentiré. Conforme a tu conducta y a tus malas acciones se te juzgará -oráculo del Señor-. (Ezequiel 24, 14)

  • Ella concibió otra vez y dio a luz una hija. El Señor dijo a Oseas: "Llámala ‘No compadecida’, porque ya no volveré a compadecerme de la casa de Israel, sino que les retiraré mi compasión. (Oseas 1, 6)


“Uma Missa bem assistida em vida será mais útil à sua salvação do que tantas outras que mandarem celebrar por você após sua morte!” São Padre Pio de Pietrelcina