Talált 231 Eredmények: trono blanco

  • Él me edificará una Casa y yo afianzaré su trono para siempre. (I Crónicas 17, 12)

  • Lo estableceré en mi Casa y en mi reino para siempre, y su trono será estable eternamente". (I Crónicas 17, 14)

  • Él edificará una Casa para mi Nombre; él será para mí un hijo y yo seré para él un padre, y afianzaré su trono real sobre Israel para siempre’. (I Crónicas 22, 10)

  • Y entre todos mis hijos -porque el Señor me ha dado muchos- eligió a mi hijo Salomón para que se sentara en el trono de la realeza del Señor sobre Israel. (I Crónicas 28, 5)

  • Salomón se sentó como rey en el trono del Señor, en lugar de su padre David. Él prosperó y todo Israel le obedeció. (I Crónicas 29, 23)

  • Salomón, hijo de David, se afianzó en su trono, y el Señor, su Dios, estaba con él y lo engrandeció sobremanera. (II Crónicas 1, 1)

  • Y el Señor cumplió la palabra que había dicho: yo he sucedido a mi padre David y me he sentado en el trono de Israel, como lo había dicho el Señor. Yo edifiqué la Casa para el nombre del Señor, el Dios de Israel, (II Crónicas 6, 10)

  • Y ahora, Señor, Dios de Israel, cumple en favor de tu servidor David, mi padre, la promesa que le hiciste, diciendo: ‘Nunca te faltará un descendiente que esté sentado delante de mí en el trono de Israel, con tal que tus hijos vigilen su conducta, caminando conforme a mi Ley, como has caminado tú’. (II Crónicas 6, 16)

  • entonces yo mantendré tu trono real, como se lo aseguré a tu padre David, cuando dije: ‘Nunca te faltará un descendiente que gobierne Israel’. (II Crónicas 7, 18)

  • ¡Y bendito sea el Señor, tu Dios, que te ha mostrado su favor, poniéndote sobre su trono como rey, al servicio del Señor, tu Dios! ¡Sí, por su amor a Israel, y a fin de hacerlo subsistir para siempre, tu Dios te ha puesto como rey al frente de ellos, para que ejercieras el derecho y la justicia!". (II Crónicas 9, 8)

  • El rey hizo, además, un gran trono de marfil, al que recubrió de oro puro. (II Crónicas 9, 17)

  • El trono tenía seis gradas, una plataforma de oro, unos sostenes, y brazos a ambos lados del asiento; junto a los brazos había dos leones de pie, (II Crónicas 9, 18)


“Proponha-se a exercitar-se nas virtudes”. São Padre Pio de Pietrelcina